Egipto. ¡Madre mía! Todavía no nos lo creemos. Gente de Internet, Egipto es indescriptible, pero haremos nuestro mejor esfuerzo para que os entre el gusanillo por ir.
En fin, lo mejor será empezar por el principio...
CIRCUNSTANCIAS DE VIAJE
No es que seamos muy fans de los viajes guiados en grupo. Nos gusta ir por libre y a nuestro ritmo. Poder quedarnos lo que queramos en un sitio o en otro, ir descubriendo las cosas por nosotras mismas. Pero en este caso, con la idea que teníamos del país y como nos habían recomendado al guía, elegimos esta opción. Y la verdad es que tuvimos mucha suerte con el grupo (¡os echamos de menos!), así que... ¡final feliz!
SEGURIDAD
Empezamos por el tema peliagudo. ¿Es Egipto un país peligroso en la actualidad? Realmente, no creemos que la respuesta sea tan simple como responder "sí" o "no". Mirad, Egipto puede tener una situación complicada, sí, pero sabe de lo que vive: el turismo. Y lo cierto es que tú, como turista, no vas a salirte del A-B-C. Vas a ir a ver los templos de Luxor y Aswan y las pirámides a El Cairo. Fin. Y eso sí es seguro. Muy seguro.
Bajo nuestra percepción y nuestras circunstancias de viaje, no nos ha parecido peligroso. No nos hemos sentido inseguras en ningún momento (aunque sí hemos visto un incidente que nos dejó mal cuerpo puntualmente, ya os contaremos más adelante). También queremos resaltar que a Abu Simbel nos fuimos en un autobús con un hombre armado, lo cual nos manda un doble mensaje: "estamos protegidos por este hombre" y "necesitamos estar protegidos por él". Pero como no nos dimos cuenta de este detalle hasta después de la excursión: inseguridad 0.
Los egipcios son agradables (sobre todo si quieren algo de ti). Únicamente son un peñazo cuando te intentan venderte algo. Esto, nos lleva a:
¡Ojo! Una estafa muy común en Egipto es la de dar cambio mal. La moneda de una libra egipcia, LE, y la de 2€ son muy muy parecidas y se aprovecharán de ello. Te dirán que te dan cambio de 10€, de 20, de 5... y te intentarán colar 1LE(0,056€) en vez de monedas de 2€.
MONEDA
En Egipto se usa la libra egipcia, LE, aunque, si os somos sinceras, la hemos usado más bien poco porque parece que el euro también es moneda nacional. Y lo cierto es que, además de que en casi todos los sitios podíamos pagar en euros, también era más barato porque sus conversiones... dejan que desear y a veces había que pelearles, Google en mano, que hicieran la conversión bien. Si actualmente 1€ son 17,9 LE, ellos rápidamente redondeaban a 20LE.
Quizás penséis: "bueno, son céntimos", pero lo cierto es que Egipto no es barato para un europeo medio. Así que mucho ojo a las conversiones y los precios.
REGATEO y PROPINAS
Ahora que tenemos clara la moneda pasamos a lo que más se hace con ella: regatear. Comprar algo es casi una lucha constante para los turistas. Hay a quién le gusta el regateo, a nosotras se nos hace pesadísimo, pero aquí no queda más remedio. Creednos. Hasta en la tienda más "refinada" y "seria" que veáis, podéis y debéis regatear.
¿Y las propinas? Os van a pedir dinero por todo, desde por ayudaros a bajar la maleta de la cinta en el aeropuerto hasta por cortaros papel higiénico en el baño. Por supuesto, no os van a preguntar si queréis la ayuda o no. Por ello, vosotros decidís cuando darla y cuando no. Hay veces que tiene sentido (cuando os han prestado un servicio) y hay veces que no (cuando es echarle mucha cara), pero veréis que os ponen la mano más veces de las que podáis contar.
VISADO
Para viajar es necesario un visado, pero este se puede comprar en el aeropuerto de entrada a Egipto. Este visado ordinario permite una estancia de 30 días y 1 entrada al país. Cuesta sobre 25€ o 448 LE.
CLIMA
¿Calor? ¿Alguien ha dicho calor? Madrugar era obligatorio para aprovechar bien los días, pero sobre todo para no morir bajo el calor abrasador del mediodía. El sol es tan potente que de otro modo solo estarás pensando en buscar alguna sombra y en beber. El agua es un bien muy preciado e hidratarse muy importante. Como sabemos, en estos países el agua del grifo está totalmente prohibida y, con ella, sus derivados (hielo) y todo lo que se lave con ella (frutas y verduras).
Por 1€ o 20LE (que como vimos, es más), podréis comprar 2 botellines pequeños en casi cualquier sitio y si regateáis... quién sabe. Eso sí, ¡que no esté muy fría! Sabemos que apetece, pero pensad en que el cambio térmico brusco puede jugaros una muy mala pasada en el organismo.
ROPA
Un tema que nos preocupaba ligeramente era la ropa. "Mucho calor, pero cuidado con enseñar" pensábamos. Lo ideal es ropa fresca y larga de colores claros, pero si es reveladora ¡tampoco pasa nada! Nosotras fuimos con vestidos cortos, largos y abiertos, pantalones muy cortos, manga corta, tirantes, escotes, crop tops... y sinceramente, ni nos trataron mal ni nos babearon encima.
Aunque sí tuvimos decenas de móviles grabándonos mientras bailábamos como locas la "Gasolina" (pero girls just wanna have fun!). De verdad, en este aspecto, todo muy civilizado.
Únicamente en la Mezquita de Alabastro de El Cairo tendrás que cubrirte el pelo y cada parte de tu cuerpo de los hombros a las rodillas. También puedes llevar bolsas de plástico para los pies si no quieres descalzarte. O puedes comprarlas allí, hay vendedores ambulantes que por 10LE (0,5€) te los venden.
VUELOS Y HOTELES
En esta ocasión, hemos realizado tres vuelos para ir y movernos por Egipto, hemos dormido en una motonave y, finalmente, nos hemos alojado en un hotel.
Vuelo Madrid-Luxor. Compañía: Fly Egypt.
Vuelo Aswan-Cairo. Compañía: Fly Egypt.
Vuelo Cairo-Madrid. Compañía: Fly Egypt.
Motonave Nile Goddess. Un hotel surcando el Nilo. Habitaciones espaciosas y fresquitas, comidas variadas, unas vistas preciosas desde la cama a las orillas del Nilo, y una azotea con una piscinita y cerveza Sakara que te lleva al paraíso. Aunque las moscas son unas pesadas.
Hotel Le Méridien Pyramids Hotel & Spa. Un paraíso de hotel: habitaciones grandes, piscina de ensueño, vistas a las pirámides y un buffet desayuno para que se te caiga la baba. Aun no sabemos como consiguieron sacarnos de allí.
COMPRAS
¿Y qué me compro yo? Excelente pregunta. Todo queremos recuerditos de nuestro paso por el mundo. Hay mucho donde escoger: cartuchos, chilabas, escarabajos, figuras de dioses y pirámides, papiros, especias, inciensos, ankhs... No os preocupéis que se van a encargar de que no se os pase nada por alto.
Recomendación: Si hablamos de comprar souvenires y recuerdos, los más baratos y más variados los encontramos a las puertas de los templos y sitios de interés (sí, con los vendedores pesados). En el barco podéis comprar un cartucho con vuestro nombre, pero no recomiendo nada más. Costará sobre 20€ y sí, es carillo (el mío ya tiene la correa rota, pero bueno). No dudéis en regatear, ¡pelead por el precio que queréis! Chilabas, escarabajos, figuras... no lo dudéis: en los templos de Luxor/Aswan. Nosotras lo fuimos dejando, con las esperanzas puestas en el mercado de El Cairo y fue un desastre... Muchas menos cosas, más feas y más caras :(
¡Ojo! Cuidado con las tiendas a las que os lleven porque serán caras y podéis llevaros algún sustito.
¡Bueno! Hemos hablado de la seguridad, de regateos y de compras, pero ¿qué hay del viaje? ¡Lo que queremos por encima de todo es conocer y explorar!
DÍA 1 - ¡Nos vamos a Egipto!
Horas de aeropuerto, horas de avión y ya solo por plantarnos delante del Nilo nos mereció la pena. ¡El Nilo! También nos sorprendió un poco lo de que hiciera 30ºC a las 9p.m., pero no era más que una calurosa advertencia de lo que nos encontraríamos los próximos días.
Empezamos por tanto el Crucero por el Nilo, un verdadero placer. La mayoría de los cruceros por el Nilo ofrecen las mismas paradas más o menos. Nosotras hemos cogido la ruta de Luxor a Aswan.
DÍA 2 - Luxor
Objetivos del día:
Valle de los Reyes - Templo de Hatshepsut - Colosos de Memnón - Templo de Luxor - Templo de Karnak
Valle de los Reyes
Empezamos la mañana movidita madrugando mucho para irnos al Valle de los Reyes, en el poblado de Deir el-Medina, donde el tiempo se detuvo hace poco más de tres milenios.
"El Valle bañado por la luz del sol, está salpicado por los caminos modernos que conducen a las tumbas y que sirven como muros de protección. Los enterramientos se abren como heridas en la tierra y se sumergen en la profundidad de la montaña tebana en una sucesión de cámaras y corredores descendentes, plagados de textos religiosos, de figuras divinas que majestuosas observan desde la atemporalidad, dándonos la bienvenida desde los muros y los techos. Sin duda es una obra faráonica."
Para saber más: Los obreros de la muerte. Fernando Estrada Lara. Planeta, Barcelona, 2001. El Valle de los Reyes
Para nosotras esta excursión fue el mejor comienzo de viaje posible.
Precio:
La entrada normal da acceso a tres tumbas, cualesquiera de las que estén abiertas. Normalmente Ramsés IV (KV 2), Ramsés IX (KV 6), Merenptah (KV 8), Ramsés III (KV 11), Tausert y Setnajt (KV 14), Sethy II (KV 15), Thutmose III (KV 34), Amenhotep II (KV 35), Montuhirjopehef (KV 19) y con suerte Ramsés I (KV 16). Nosotras fuimos a Ramsés III, IV y IX. Precio: 70LE (9,50€).
La tumba de Tut-anj-amon (KV 62) NO está incluida en la entrada normal y debe pagarse aparte. Precio: 80LE (10,86€).
Además, mientras que sacar fotos con el móvil es gratis, si queréis introducir una cámara deberéis pagar (sí, es absurdo, pero es así).
Horario: de 6-17h.
Templo de Hatshepsut
La única faraona de la que ya os hablábamos en una entrada anterior (aquí). Su templo es considerado "uno de los monumentos incomparables del Antiguo Egipto" y no es para menos.
Colosos de Memnón
Previa parada en una fábrica de alabastro, nos pusimos rumbo a los famosos Colosos de Memnón que, antaño, custodiaban un templo que se ha perdido en el tiempo. Curiosamente, reciben su nombre de la mitología griega, concretamente del dios Memnón. Esto se debe a que en el pasado, los viajeros decían oír cantar a los colosos al amanecer y se relacionó este hecho con el asesinato de Memnón a manos de Aquiles. Tras su muerte, su madre, diosa de la aurora, envió a sus hermanos, los cuatro vientos (el del Norte, el del Sur, el del Este y el del Oeste) a recoger su cadáver.
Templo de Luxor
Luxor, antigua Tebas, fue la capital del imperio egipcio y, como tal, en ella se encontraba el santuario del ka por excelencia: el Templo de Luxor. Estaba dedicado a Amón-Ra y a Mut.
El templo sufrió múltiples transformaciones a lo largo de las dinastías empezando por Amenofis III y terminando por Ramsés II. En sus orígenes, estaba unido al templo de Karnak por una larga avenida adornada por esfinges que tenían cabeza de carnero y, posteriormente, cabeza humana.
Templo de Karnak
Para completar este primer día, no podía faltar el templo de Karnak que, personalmente, fue lo más espectacular de todo el día. Su Sala Hipóstila nos encandiló al momento con su nave central flanqueada por dos naves laterales sostenidas por columnas de capiteles papiriformes indescriptibles.
Este templo fue el principal recinto de culto a partir del Imperio Nuevo. Decía José Lull que a a lo largo de más de dos milenios, los faraones lo embellecieron en honor a Amón, el gran dios del Imperio Nuevo. Como decíamos, estaba conectado con el Templo de Luxor por la Avenida de las Esfinges y, el día de “Año Nuevo” se realizaba la procesión de Amón por este paseo hasta el otro templo.
Este templo representa el universo recién creado. Refleja el simbolismo del montículo primigenio que, con la creación, emergió de las aguas del Nun, el caótico océano primordial.
¡Ya os imagináis que terminamos con unas expectativas altísimas el día!
DÍA 3 - Seguimos Nilo abajo
Objetivos del día:
Templo de Edfú - Kom Ombo
Aprovechamos que el día tenía pocas paradas y mucho viaje en barco para probar la gastronomía egipcia. Porque hay que probar de todo y morir de algo. No pudimos pasar por alto la posibilidad de probar koshari y okra, pero seguimos prefiriendo una buena tortilla de patatas.
Templo de Edfú
Es, sin duda, uno de los templos mejor conservados actualmente debido a que durante mucho tiempo permaneció enterrado en las arenas del desierto. No fue desenterrado hasta el siglo XIX.
Estaba dedicado al dios Horus, hijo de Isis y Osiris, y representado con un halcón o un humano con cabeza de halcón.
Tras este templo, volvimos a nuestro crucero y no desembarcaríamos hasta llegar a Kom Ombo.
Kom Ombo
Al atardecer, llegamos a Kom Ombo, uno de los templos más famosos por ser completamente simétrico (¡una tranquilidad para la vista!). Esto se debe a que está dedicado a dos dioses: Horus y Sobek.
A pocos pasos, está el Museo del Cocodrilo, al que también fuimos, donde hay varios cocodrilos momificados que se conservan de una manera pasmosa.
Como detalle, al final del día pasamos la Esclusa de Esna que salva un desnivel de 10 metros.
DÍA 4 - Aswán
Objetivos del día:
Abu Simbel - Baño en el Nilo - Poblado nubio - Aswán
Abu Simbel
A las 2 a.m. salimos camino a Abu Simbel en autobús. Nos esperaban 3 horitas de camino para llegar al alba y ver amanecer desde allí. ¿Merece la pena? Sin duda. ¿En el momento en que sonó el despertador queríamos morir? Puede ser.
Estos templos también permanecieron varios siglos bajo la arena. Fueron descubiertos a lo largo del siglo XIX y la construcción de la Presa de Asuán los puso en peligro durante el siglo XX, teniendo que ser reubicados. Por la ayuda recibida, Egipto donó importantes tesoros y templos a otros países, como el Templo de Debod que se encuentra en Madrid, o el de Dendur, en New York.
Es una de las construcciones más espectaculares de Egipto, destacando especialmente el Templo de Ramsés II, con una fachada de cuatro estatuas de 20m de altura que se tallaron directamente en la roca. Por supuesto, sin desmerecer el Templo de Nefertari, su esposa favorita.
Una curiosidad sobre el templo principal es que estaba orientado de tal manera que cada 21 de febrero (nacimiento de Ramsés) y 21 de octubre (su coronación) el sol del amanecer entraba e iluminaba las estatuas del fondo salvo una: la de Ptah, dios de la Oscuridad. Actualmente, dada la nueva ubicación, ocurre los días 22.
Baño en el Nilo
Surcamos el Nilo camino al poblado nubio disfrutando del paisaje y descubriendo los árboles vergonzosos. Unas curiosas plantas a las que si tocas sus hojas las cierran de una manera adorable.
Al llegar a las playas del poblado nos bañamos por fin en el Nilo para sentirnos verdaderos cocodrilos. Y tocamos la rababah, un instrumento típico que sonaba (gracias a nuestro talento) como un gato atropellado.
Poblado nubio
El poblado nubio tiene tanto encanto como cacas de camello en sus callejuelas. Merece la pena investigar un poco, perderte por sus tiendas y sus coloridas casas.
Aswán
Visitamos fugazmente la ciudad de Asuán donde tomamos un refrigerio y, como buenos turistas, probamos la shisha.
DÍA 5 - Terminando con Aswán
Objetivos del día:
Templo de Philae - Obelisco inacabado
Templo de Philae
El templo de Philae está a orillas del Nilo y, para nosotras, es uno de los más bonitos. También sufrió las consecuencias de las presa de Asuán, por lo que tuvo que ser trasladado piedra a piedra hasta su emplazamiento actual.
Estaba dedicado a Isis, diosa de la magia, el amor y la maternidad. Y en él, se conservan los últimos jeroglíficos egipcios que se escribieron en la historia, datados en el año 394. Una verdadera joya.
Tras esto, fuimos a una tienda de perfumes. Una parada incluida, pero sin la que podíamos vivir. Olisqueamos mucho, pero compramos poco.
Obelisco inacabado
Personalmente, le cogí un poco de manía. La razón fueron los 42ºC que casi hacen que nos muramos allí mismo. Vivíamos tan al borde de la insolación que cuando llegamos hasta arriba para verlo y vimos un pedrusco sin más, no pudimos apreciarlo (¡perdón!).
Precio: Adultos 80LE (4,6€) y estudiantes 40LE (2,3€).
Abandonamos - no sin pena - el sur de Egipto para volar a su capital donde nos esperan los platos más fuertes del viaje...
DÍA 6 - Giza
Objetivos del día:
Pirámides de Giza - Dentro de la pirámide de Keops - Esfinge - Menfis - Saqqara - Espectáculo de luces y sonido
Pirámides de Giza
Las pirámides de Jufu, Jafra y Menkaura o como actualmente las conocemos: Keops, Kefrén y Micerinos son, quizás, lo que más esperábamos del viaje. Son los monumentos más emblemáticos de Egipto y la última maravilla del mundo antiguo que ha sobrevivido hasta nuestros días.
Nos podríamos poner muy poéticas para hablar de ellas, verdaderamente se lo merecen. Hay que verlas en vivo y en directo para comprender su magnificencia. Tomarse un tiempo para dar un paseo a su alrededor es de las cosas más relajantes que puede haber.
Dentro de la pirámide
No podíamos estar ante la pirámide de Keops y no entrar en ella. Absténganse claustrofóbicos, eso sí. El túnel es muy estrecho en algunos tramos, largo y empinado. La experiencia para nosotras era imprescindible y, desde luego, tuvimos unas horribles agujetas el resto del viaje. Además, creo que nunca hemos sudado tanto (jeje).
Esfinge
Terminamos la visita de Giza acercándonos hasta la Esfinge a contemplarla en todo su esplendor y a sacarnos la foto de rigor.
Menfis
Viajar a Egipto es un continuo descubrimiento, minuto a minuto. En Menfis, primera capital del Egipto que unificaba el Alto y el Bajo, nos topamos con el Museo al Aire Libre de Mit Rahina. Allí, destacamos la estatua de Ramsés II que se mantiene tan perfecta, tan pulida, que cuesta creer la cantidad de años que tiene.
Saqqara
Nuestro siguiente destino es Saqqara, un gran complejo donde pudimos apreciar la Pirámida de Zoser o Pirámide Escalonada. Pero no solo la pirámide es digna de ver allí, por ejemplo, el interior del pasaje, un pasillo con columnas a ambos lados, también es admirable.
Espectáculo de luces y sonido
A las 20.00 teníamos entradas para un espectáculo en el que se proyectaban luces e imágenes sobre la esfinge y las pirámides, mientras nos contaban un poco de historia antigua. Además, las vistas desde el patio de sillas son increíbles y dan unas fotos preciosas.
DÍA 7 - El Cairo
Objetivos del día:
Callejeando por El Cairo - Ciudadela de Saladino y Mezquita de Alabastro - Khan el-Khalili - Museo de El Cairo
Callejando por El Cairo
Callejeamos por el Barrio Copto, la zona cristiana de la capital egipcia, que alberga un gran patrimonio histórico y monumental, aunque tampoco tuvimos tiempo de apreciarlo en su totalidad. También visitamos la Sinagoga de Ben Ezra donde según la tradición local, se encontró al bebé Moisés.
Ciudadela de Saladino y Mezquita de Alabastro
En lo alto del monte de Muqatam, nos encontramos la Ciudadela de Saladino, declarada Patrimonio de la Humanidad y usada para proteger la ciudad de los ataques de los Cruzados. Su eficacia fue tal que hasta el siglo XIX fue usada como sede del gobierno egipcio.
Allí pudimos ver la imponente Mezquita de Mohammed Ali o Mezquita de Alabastro, ya que ese material predomina en la construcción de estilo barroco otomano y recuerda a Agia Sofia de Estambul. Con su impresionante cúpula de 52 metros de altura y su paisaje desde el cuál se puede ver toda la ciudad de El Cairo, se convierte en una visita obligatoria.
Precio: Adultos: 140LE (8€). Estudiantes: 70LE (4€).
Horario: 9.00-16.00h. Cierra los martes.
Khan el-Khalili
Además, allí vivimos un incidente que, por si acaso se nos había olvidado, nos devolvió a la realidad. Está claro que cuando viajamos vemos la cara bonita de un país. Tuvimos la desgracia de, callejeando por el mercado, presenciar una paliza de un hombre a una mujer que nos dejó un mal cuerpo que aun dura hasta el día de hoy cuando lo recordamos.
Museo de El Cairo
¿Recordáis que hablamos de las agujetas resultado de nuestra incursión en la pirámide de Keops? En las escaleras del museo notamos sus peores efectos... aún así no fueron suficientes para empañar nuestras ganas de descubrir los tesoros más increíbles: la máscara y el sarcófago de Tutankamon.
Y con todo el dolor de nuestro corazón... tocó volver a España y despedirnos de nuestro grupo molón y nuestro súper guía. Eso sí, no sin antes disfrutar de una noche de cervezas, vistas a las pirámides y baños furtivos en la piscina del hotel.
